Los servicios funerarios han debido enfrentar los cambios vertiginosos del siglo XXI, adaptándose a las tendencias digitales para ofrecer servicios más allá de lo tradicional. Y debido a que la tecnología se ha apoderado de prácticamente todos los rincones de nuestras vidas, incluyendo tanto el ámbito público como privado, esta ha llegado a los cementerios a través de la incorporación de códigos QR a las lápidas y nichos.
Ya son varias las funerarias en el mundo que ofrecen un cuadradito con el código QR sobre la cerámica o mármol tradicional de las lápidas. El funcionamiento es sencillo: se coloca el dispositivo electrónico frente al código QR incorporado en el nicho, y mediante la aplicación correspondiente, permite el acceso a un sistema personalizado, en el cual se podrá ver el contenido que el fallecido o sus seres queridos hayan incorporado.
Algunas familias se arriesgan por añadir otros recuerdos interactivos, como canciones, poemas, oraciones, textos e incluso la voz de su ser querido. También existe la opción de ingresar a través del QR a un libro de condolencias digital para quienes no pudieron dedicar presencialmente sus condolencias a los deudos.
No obstante, se recomienda a quienes opten por este novedoso servicio a recurrir a un código de seguridad para limitar el acceso a familiares y amigos, evitando a los curiosos o gente malintencionada.